La Física, al servicio de las ‘levantás’
El paso del Señor de la Salud de la Hermandad de la Candelaria volverá a levantarse ‘al tirón’, después de que la Junta de Gobierno lo aprobara tras una minucioso estudio realizado sobre la incidencia de las levantás y arriás en la imagen. Desde finales de los años 90 del pasado siglo, después de pasar la imagen por el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico (IAPH) para su restauración, el paso del Señor de la Salud se levantaba a pulso, por temor a que las grietas aparecidas en la base de la talla pudieran sufrir un mayor deterioro.
En la hermandad había cierta inquietud al respecto, ya que se consideraba que la forma de levantar el paso no era la idónea para el discurrir de la cofradía y se quería conocer a ciencia cierta si las levantás influían en el Señor. Joaquín Ceballos, hermano de la Candelaria, miembro del equipo de capataces y físico de profesión, fue el encargado de realizar el detallado estudio.
En la cuaresma de 2013, Ceballos midió por medio de un sistema de acelerómetros basado en la tecnología MEMs (micromáquinas electromecánicas) colocados en la parihuela de ensayo de ensayo de palio y que se activaba con el golpe del llamador. De esta manera se medía la aceleración que sufría la estructura en las levantás y arriás.
Una vez recogido los datos que el sistema de acelerómetros ofreció a lo largo de varios ensayos de la cuadrilla de costaleros el año pasado, se realizó una imagen en 3D del Señor de la Salud, con más de 15.000 puntos de cáculo, usando como estrategia la división del volumen en una multitud de subdominios adyacentes. A partir de ahí se crea un sistemas de ecuaciones para los nodos del sistema (los puntos donde se unen dos o más líneas en la figura) y se resuelve el sistema.
Aplicando los datos obtenidos con los acelerómetros a la imagen en 3D del Señor de la Salud en una proceso de simulación de levantás y arriás para ver las tensiones a las que se sometía la imagen, la conclusión (basándose en la teoría de tensión máxima de Von Misses) es que la imagen del Señor de la Salud, en la peor de las situaciones posibles sufría las principales tensiones a la altura del abdomen de la talla, no en la base donde se encuentran las pequeñas grietas. Es más, ese teórico escenario negativo en el que sufría la imagen sería equivalente a tres veces la aceleración de la gravedad.
Con todos estos datos, la conclusión que se presentó a los hermanos en el cabildo de salida es que la forma de levantar el paso no afecta en absoluto a las grietas que la imagen pueda tener en la base de la misma, ya que ni la tensión que sufre ni la dirección de las grietas así lo indican científicamente hablando. Por ello, la junta de gobierno de la Candelaria tomó la determinación de la levantar el paso como tradicionalmente se ha hecho, al cielo, algo que además debe redundar en la manera de andar la cofradía, ya que se recupera tiempo en cada una de las chicotás.
Interesante artículo de Miguel Ángel Moreno en Oclisé.
Publicado 23/02/2.014
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